Origen
Su origen ocurre cuando la semilla es llevada por don Horencio Bonilla, luego de haberla hallado en uno de sus viajes de caza en 1912. La tagua sería utilizada por él y otras familias de Chiquinquirá como materia prima para una nueva técnica “trabajo en tagua” para elaborar diferentes figuras decorativas incluyendo las miniaturas.
El trabajo en tagua en Colombia, se puede ubicar principalmente en el municipio de Chiquinquirá y Tinjacá en el departamento de Boyacá.
Técnica de trabajo en tagua dividido en procesos
En Colombia, según archivos de Artesanías de Colombia, el proceso inicia desde la recolección de la materia prima en la Región del Carare, Santander en municipios como Tununguá, La Belleza, Landázuri y San Vicente de Chucury y el Magdalena Medio.
Herramientas: mulas y costales
La semilla de diversas formas que pueden ser redondas, redondas y planas; redondas con varias secciones planas y sus variaciones se pueden encontrar como tagua común o hueca y como tagua chicón las cuales son macizas sin espacio en su interior.
Luego viene el secado que generalmente se realiza en un depósito resguardado de la lluvia. Algunos artesanos extienden la semilla para este proceso. En este proceso es necesara una caseta de secamiento.
La selección incluye el descascarado de las taguas. De acuerdo con la forma natural el artesano busca alternativas para que emerja un diseño de acuerdo a la forma de cada tagua.
Herramientas: Lijas de diferente gramaje
A partir de un secado de 5 años, la corteza se desprende fácilmente. Para la elaboración de miniaturas, la tagua es secada durante 15 a 20 años porque durante ese tiempo la semilla adquiere las características necesarias para evitar que se quiebre en los procesos posteriores (resiste mayor tensión con menor espesor).
El taqueado se realiza con la sierra circular. La tagua se divide en varios pedazos para formar rebanadas de la semilla, para este proceso se utiliza una sierra circular.
Torneado, en este proceso la tagua es montada (los artesanos denominan barrenado a este paso de montaje de la semilla en el torno) en el torno. Luego este gira a gran velocidad y con gubias y formones, la semilla va desprendiendo en forma de viruta (viruta cabelluda es el nombre que utilizan los artesanos). Herramientas: torno, gubias y formones.
En el tallado la pieza se esculpe en relieve, labra o grava de acuerdo a la intención del artesano. Gubias, formones, limas, cuchillas, esmeriles son las herramientas empleadas en este proceso.
En el proceso de fresado (donde casi siempre las piezas provienen del torno) se avellana la tagua mediante el uso de un tornillo de cabeza estriada.
El esmerilado es un proceso que facilita el desprendimiento del material, en este la tagua es rallada se utilizan para ello piedras de diferentes características (tipo de grano, anchas, delgadas, e.t.c)
El pulido y repulido se realiza mediante el frote de la tagua con diferentes calibres de lija para dejar la superficie de la semilla lisa y suave.
El brillado consiste en frotar las piezas con la viruta de la tagua mejorando así el reflejo de la luz en la semilla. Viruta fibrosa (en pequeñas tiras)
Armado, durante este se unen las piezas mediante el pegue y ensamble para formar un motivo. Se utilizan, para el pegue: colbón de madera. Para el ensamble: palillos, alambres y resortes.
Decoración, se refiere a la aplicación de color a las piezas.
Terminado de obra, se emplea el terminado rústico donde se utiliza el esmeril; el esmaltado donde se aplica laca y las denominadas labores finales, si es que la pieza lo exije, que consiste en la aplicación de pequeños detalles como los ojos de acuerdo a la pieza trabajada. Se utilizan pinceles, plumas, textiles, colbón de madera, palillos.