El tiempo Wayúu, hombres

Foto Liz Fetiva, El Jojoncito, Guajira, Colombia 2018

Hola soy Liz Fetiva y estamos en el tiempo de la artesanía, bienvenidos (episodio 4)

26″ Acabamos de escuchar Jayechii canto Wayúu y hoy estamos en este tiempo, el Wayúu; con este episodio, cerraremos este ciclo.

En Colombia existen 102 pueblos indígenas, según cifras del Ministerio del interior. Anotan que aproximadamente el 3, 43% de la población es indígena. Y el 20% de la población indígena es Wayúu.

Colombia, como la mayoría de Latinoamérica es un país de pluralidad étnica y biodiversidad, nuestra diversidad es nuestra riqueza.

El antropólogo y fotógrafo de la National Geographic Wade Davis dijo en el lanzamiento de la colección de libros Savia (con v corta)

“…Hay al menos una generación de estudiantes colombianos que tuvieron que oír todo el tiempo una mentira, que el país es un país de violencia, de los problemas, pero esa no es la Colombia que yo conozco, la Colombia que me encanta es el país que tiene más biodiversidad que cualquier otro país en el mundo, es el país más rico a cualquier nivel de botánica, ecología y todo esto en el mundo…”

Este podcast #El tiempo de la artesanía es una invitación a que exploremos la riqueza cultural que está ligada a la biodiversidad que aún tenemos.

2´21″Hoy vamos a hablar sobre los hombres en la comunidad Wayúu. Nos basamos en el encuentro de de la colección “Hilando Memoria Indígena” capítulo el arte del tejido entre los hombres de la etnia Wayúu de la Guajira Colombo Venezolana, de la Universidad de América en Venezuela, porque recordemos que La gran Nación Wayúu está ubicada en Colombia y Venezuela”

Internémonos en el mundo mágico religioso que describe la investigación que les acabo de comentar.

3´17″ “Para la sociedad Wayuu, existe un código que ordena y regula los intercambios simbólicos que en ella ocurre. Este código es una forma del saber explicativo del hombre, sus relaciones con la naturaleza y el universo que se expresa a través de sus creencias y prácticas mágico – religiosas. Maleiwa, es el espíritu que interviene en el nacimiento y muerte de los Wayuu; es el ser creador, es la figura central del mundo religioso y el propiciador de las lluvias y de los fenómenos naturales. De allí que los Wayuu se consideren descendientes de las fuerzas del cosmos: M’ma (tierra), Juyá (lluvia), Jo’uttai (viento), deidades benévolas.La comunidad Wayuu rinde un ferviente culto a los muertos -Yoluja’a-. Conocedores del bien y del mal, identifican a Wanulúu como un espíritu maligno en contraposición a Maleiwa encarnación del bien. Aquel es destructor de todo cuanto se propone; sus auxiliares son, el hambre, la sequía, las pestes, las enfermedades; otro aliado de Wanulúu es Yoluja’a o espíritu de los muertos, que sale en las noches para intentar robar las almas de los vivos. Los Wayuu creen que la muerte es la separación del cuerpo y la liberación del alma. Después de su fallecimiento y antes del segundo entierro, el Yolujáa según las creencias está presente en casas y poblados.Los entierros entre los miembros de la cultura Wayuu son acontecimientos muy importantes, en los cuales los familiares tienen que actuar, para que la persona extinta tenga una buena y honorable despedida. Los muertos viven plenamente como espíritus e intervienen en forma continua en la vida de los vivos, por lo tanto, es necesario realizar una serie de ceremonias. Tradicionalmente, cuando muere un Wayuu, sus restos son velados uno o dos días con sus noches, según sea su estatus socio económico. Entre grandes manifestaciones de duelo y dolor, familiares del difunto, con el rostro cubierto, lloran por horas con llanto seguido y lastimero. Si un vivo viola estos principios, puede disgustar al espíritu y ponerlo en su contra, por lo cual resulta peligroso no seguir la práctica de las ceremonias.Según las creencias de los Wayuu, se muere dos veces: por primera vez en el momento en que se desaparece físicamente, cuando el alma se libera del cuerpo. Se muere por segunda vez, cuando se exhuman los restos y se colocan en una vasija de barro para su segundo velorio y entierro. A partir de entonces el alma de los muertos emprende su último viaje por el cosmos, llegando a Jepira, morada final.Los eventos de muerte y entierro de un miembro de la comunidad son grandes acontecimientos. Estos son días de camaradería que refuerzan los lazos de amistad, solidaridad y cooperación por cuanto permite reunir miembros de los diferentes clanes Wayuu. “

7´12″ Y es que La muerte es un gran acontecimiento Wayúu. Tiene varias implicaciones en el cómo transcurre el tiempo en la ranchería. Entre ellas está el hecho de que labores de tejeduría mientras dure el entierro y duelo quedan totalmente suspendidas. Esto puede durar varios meses.

Otra implicación tiene que ver con el atuendo mortuorio, donde se utiliza una pieza llamada Sheii, principalmente para enterrar a los caciques. Hace poco tome el curso Es la moda moderna ? del Museo de Arte Moderno de New York a través de coursera. Allí conocí la historia de Dr. Pia Interlandi.

Cuando murió una persona que ella amada, en medio del dolor de un, una perdida de un ser cercano, le causó gran trauma vestirlo, esto por el rigor mortis. Así que se dió cuenta de la necesidad de hacer aquel momento que a ella le generó dolor, un momento más llevadero. ¿Cómo vestir al ser amado y despedirse de él en una forma más calmada? Desarrolló el Little black dress. una manta mortuoria, con una particularidad y es que cuando las personas se acercan para dar el último adiós, al entrar en contacto con el cuerpo del difunto a través del tacto, este se queda estampado en la manta. Lo traigo a colación porque, mientras estudiaba este caso, de inmediato pensé en el sheii y esto me hace sentir la necesidad de seguir explorando las culturas indígenas porque encuentro sabiduría.

9´09″ Continuando con el tema sobre la muerte, Cuando un familiar abandona esta tierra, toda la parentela se desplaza hasta el sitio de su deceso. Entonces allí los hombres construyen las enramadas lú’úma en wayunaiki, que serán los sitios para que la familia en camino se albergue.

La construcción de la enramada se realiza principalmente con dos materiales que brinda el contexto, son troncos de un árbol nativo llamado trupillo y yotojoro, que es un cactus. Se utiliza el corazón del mismo una vez está seco. Los tallos frescos son utilizados como alimento de chivos y las cabras, y también se elaboran con ellos las cercas vivas.

Las enramadas protegen del clima, son frescas y cuando son bendecido por el agua esta no se filtra al interior. Es totalmente impermeable y su duración promedio es de 50 años. También es el espacio para reuniones, son su sitio de reunión ancestral, realizan festividades, es un sitio para la reunión comunal.

10´38″ Entre los trabajos textiles que realizan principalmente los hombres también están los relacionados con el apero del caballo, cada vez estos objetos pierden más popularidad por el reemplazo de las motos por caballos en la comunidad.

Tejen en telar vertical una estructura en paja gruesa que hace de armazón para montar el caballo, va cosida de una manera que recuerda el amarrado del techo del rancho y también se teje con el yotojoro , se llama esterilla. Así lo describe el arte del tejido entre los hombres de la etnia Wayúu de la Guajira Colombo Venezolana:

“La silla se compone de un armazón de madera elaborado de una sola pieza y forrado en cuero de res. Encima viene la mantilla también en cuero.”

Otro componente del apero de los caballos es El peyón, un tapiz tejido en un marco y con la utilización de una aguja, similar a la aguja conocida como de punto ruso. Los diseños son únicos y son realizados por cada tejedor destacándose el magnífico uso del color. Esta pieza cubre la silla y se ajusta mediante una faja de algodón tejida; al igual que la cincha que sostiene a su vez la silla en el animal.
Otro objeto es la kutpera, una pieza tubular elaborada en la técnica de osonuchii en hilo de diversos colores y diseños.

Hoy en día la técnica del peyón se ha diversificado en otro tipo de productos, por ejemplo hicimos una co creación con artesa jala ala en el Jojoncito y entre los resultados obtuvimos forros para kindles, con gran acogida entre los interesados.

12´52″ Los sueños en la cultura Wayúu son muy importantes, recuerdo que Eudomenia Tiller Pana me contó que su nombre fue asignado a un sueño que tuvo su mamá justo antes de que decidieran el nombre de la niña.

Acerca de los sueños anota el documento hilando memoria indígena, abro comillas:

“El sueño, dentro del mundo de sus creencias, es una predicción. A través de él interactúan con su ser supremo o Maleiwa quien transmite mensajes muy precisos cuyo significado les puede afectar la vida diaria.Los sueños tienen el poder de despertar intensas emociones, orientan el desarrollo de los acontecimientos en la cotidianidad y anuncian buenos o malos augurios. En algunos casos, cuando no es posible interpretar el significado o mensaje del sueño se acude al Piache u Ou’utchi para que lo descifre.

Cerca de la ranchería de Antonio Ipuana encontramos un grupo de hombres encabezados por Juan Epieyu, quien es un maestro en la elaboración de los cordones, riendas y demás adornos de caballos, mulas y burros. Su relato se refiere a cómo “en sueños las culebras, la tortuga o morrocoy juegan con él. Cuando la culebra esta quieta, la agarra y puede recrearse con ella, es para jugar con los hilos y aparecen los diferentes diseños o kanaas. Cuando la culebra salta, brinca, no se deja domar, está arisca son diseños muy difíciles y no se aprenden con facilidad. Las intenciones son de aprender la técnica como debe ser, pero la culebra no se deja agarrar; él está desbaratando, la culebra lo trastorna. Tiene que tener muy claro las hebras del diseño o de lo contrario el trabajo no sale de calidad. La culebra alborotada indica que debe desbaratar varias veces, no sale como quiere, vuelve a intentar el mismo diseño, tiene mucho dibujo en la cabeza. Las culebras que más le gustan son la boa y la cascabel, se le aparecen a veces por los caminos, él las quiere no las mata, cuando se encuentra una tortuga o morrocoy y se deja acariciar o jugar, se entrega, es arte. Se apropia de los diseños y no vuelve a soñar…

16´18″ Con Carlos Pushaina, en su ranchería de Karraloutamana, encontramos el artista de las guaireñas o cotizas, especie de calzado muy difundido entre hombres y mujeres. En su narración anota que cada persona nace con su don, su conocimiento es espiritual y se adquiere a través de revelaciones, de sueños, momento durante el cual se abre la mente para posteriormente llevarlo a la práctica. La figura de los tejidos vino de la revelaciones, es el conocimiento Waleker; es la araña quien en un principio les enseña a los Wayuu, cómo trabajar los hilos y a componer los diseños que se denominan Kanaas. En su relato aparece el comegen que es el que enseña a remendar el tejido. Los diseños de las guaireñas son abstracciones de la naturaleza. La herramienta de trabajo para elaborar las guaireñas es una maquina inventada por los Wayuu; fabricada en hierro y compuesta por dientes metálicos a través de los cuales van tejiendo los hilos de hilaza, algodón y nylon. Finalmente las piezas tejidas las cosen a las suelas que elaboran de caucho reciclado de llantas o de cuero” Cierro comillas

Sombreros

18´00″ Sobre la tejeduría en sombreros comenta Gary Alexander González Siijuna maestro artesano Wayúu

Nuestros antepasados tinturaban la Mawisa (Material con el que se hace el sombrero) con tinturas naturales, como lo es con el fruto del divi divi por ejemplo:

Hoy nos valemos de las pinturas alijunas para apropiarnos de ellas y emplearlas en nuestros sombreros, como quien toma lo de afuera para fortalecer lo propio

Gary Alexander González Siijuna, Maestro artesano Wayúu

El sombrero se elabora con técnicas de cestería, trenzado y paleteado. Había un sombrero que se denominaba de ala ancha que ha entrado en desuso debido a su gran complejidad en el tejido.

Algunos de los diseños que se utilizan hoy en día son :

Primavera, tortuga o morroco, Flauta, Estrella y Flor de maíz

más utilizados son: Iwouya Primavera
Maikusiyaa Flor de maíz
MolokonayaaTortuga o morrocoy
Jolotsouyaa Estrella
Masenayas Flauta

19´08″ El arte de las totumas o iitas en Wayunaiki, generalmente es realizado por lo hombres, consiste en la creación de recipientesde totumo, en varias ocasiones decoradas Yo recuerdo que cuando mi abuelita estaba viva, yo era pequeña habían totumos en la casa, a mi me parecía raro tomar en totumo y ahora de verdad que me parece genial (risas)

19´44″ Los hombres también tejen la mochila denominada Katoüi, una especie de red que soporta las vasijas donde se deposita el agua y son tan resistentes que soportan los viajes de traslado de las mismas, no, desde los pozos a las rancherías. Son varios kilómetros a pie, en burro, a mula a caballo, en moto o aveces en camionetas que deben recorrer. También vi a los hombres tejiendo la tradicional mochila Wayúu completa.

20´28″ Y así vamos llegando al final De este episodio; disfrutamos de la magia del mundo Wayúu y recorrimos algunos objetos que tradicionalmente tejen los hombres y otros que los hacen hombres y mujeres y evidenciamos el hecho de que los hombres también son tejedores.

En el recorrido de estos 4 episodios del tiempo de la artesanía en el tiempo Wayúu recorrimos algunos aspectos de la cultura Wayúu notamos su capacidad de resiliencia que ha permitido que la comunidad siga entre nosotros. Conocimos a través de la leyenda de Waleker, el origen de los tejidos y algunas de sus técnicas. los roles de mujeres y hombres en el mundo textil.

21´21″ Personalmente he recibido lecciones de vida gracias a la oportunidad de compartir con la comunidad, quiero referirme a una de ellas para cerrar los episodios del tiempo Wayúu.

Cuando planeamos un ejercicio de co creación con artes Jala ala en el Jojoncito, Guajira Colombiana, me encontraba muy emocionada.

Al siguiente de mi llegada día me levanté temprano y le dije a Eudomenia Tiller Pana, mi anfitriona. Estoy Lista Eudomenia, vamos a hacer nuestro taller y me dice Eudomenia, no, no no Liz, primero nos vamos a ir de paseo, nos vamos a la Serrania del Jala ala. Allí aprendí que lo primero es la empatía. Tengo un hermoso recuerdo de es día con todos los chicos de la Rancheria por el desierto Guajiro llegando a la serranía del Jala Ala totalmente florecida, gracias por eso.

22:29 Algunos de los aprendizajes para compartir de las vivencias en el El tiempo de la artesanía son, por ejemplo la observación, es a través de este ejercicio que las personas tejedoras logran elaborar o inventar un diseño. Los sueños de Juan Epiayu a través de la serpiente lo llevaban a probar a experimentar (recuerdo todas las veces que mujeres y hombres Wayuu tejen y destejen para aprender una técnica). Empatizar a dejar el afán y a gozar en tiempo presente son otros aprendizajes para compartir, muchas gracias.

23´12″ Para tejer este episodio agradecemos a La Universidad de América de Venezuela por su investigación Hilando Memoria Indígena, capítulo el arte del tejido entre los hombres de la etnia Wayúu de la Guajira Colombo Venezolana. a los autores y a las personas Wayúu que hicieron posible este relato Antonio Ipuana, Danilo Epieyu, Mariana y Virginia Epieyu. Juan Epieyu, David Epieyu, Horacio Epieyu, Feliciano Ipuana y Ricardo Ipuana. Agena Ipuana, Ramón González Jusayu. Silvio Pushaina, el Tata. Carlos Pushaina. Ursula Aguilar Ipuana. Cecilia Bonivento y María Teresa Lindao Uriana

A la comunidad Agil de Latinoamérica, especialmente al AOC Bariloche en Argentina y AOC Colombia, gracias por inspirarnos

y al equipo boui: Ruth Guevara; Carolina Avila; Angela Guevara, Jaime Álvarez y a mi mentor Carlos Arturo Quiroga.

Hasta la próxima en el tiempo de la artesanía

Cibergrafía

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